Un jurado popular sentenció que Lucas Pitmann, Tomás Jaime y Juan Cruz Villalba son “no culpables” del abuso sexual de una adolescente en el camping El Durazno, de Miramar, la familia de la menor está “shockeada” y con “bronca” y adelantaron que irán “hasta las últimas consecuencias” para revertir la sentencia.

Los padres de la menor declararon tras el veredicto su posición y consideraciones. “Mar del Plata no está preparada para un juicio por jurado en estos casos y quedó claro“, dijo Gisela, la madre de la adolescente, y agregó: “No hay perspectiva de género, seguimos en una sociedad machista y esa es la mirada que tienen con las mujeres”.

A la madre de la menor le cuesta hablar. Por momentos se le atragantan las palabras y la invade el llanto. Pasaron menos de 24 horas desde que el juicio terminó y para la mujer la pelea sigue, aunque las leyes no le permitan apelar el veredicto, sostiene que, junto a su abogado Maximiliano Orsini, irán “hasta las últimas consecuencias”.

“Este veredicto es mentira. Si es necesario iremos a cortes internacionales para poder apelar. En un caso de abuso y femicidio no se debe hacer juicio por jurado, pero se hizo y la víctima no tiene voz”, expresó Gisela y agregó: “Fue un veredicto machista y prejuicioso”.

La mujer expresó que tenían “expectativa” con esta sentencia. Expectativa de poder reparar el daño, de sanar, de sentir que justicia. “A pesar de lo mal que la pasó mi hija este tiempo, ella estaba ahí, quería escuchar y lamentablemente lo que tuvo que escuchar fue terrible”, dijo Gisela y agregó: “Mi hija está shockeada, bloqueada e indignada. Con bronca. Ayer recibimos, otra vez, un cachetazo en la cara de la Justicia“.

La madre de la adolescente destacó todo el apoyo que recibieron al conocerse la sentencia. Principalmente los llamados que recibió desde el Ministerio de la Mujer. “Se pusieron a disposición y nos ofrecieron ayuda para apelar. Más allá que no sea en esta ciudad, en otros lugares están indignados con esto que pasó”, dijo.

“Sentí otro cachetazo y que tenía que estar al lado de mi hija y hacerle saber que ese veredicto está mal”, concluyó la madre de la menor que denunció que Lucas Pitmann, Tomás Jaime y Juan Cruz Villalba la violaron cuando tenía 14 años.

Prejuicios como estrategia

La madre de la adolescente lamentó que las audiencias del juicio no hayan podido ser públicas, para exponer el caso en toda la sociedad. “Éramos conscientes que si este caso no se hacía visible quedaba en la nada, como sucede en tantos casos de abuso en Mar del Plata, en los que en Tribunales les cierran la puerta en la cara a las víctimas”.

“Los imputados y defensores tuvieron como estrategia ensuciar, es la única estrategia que tienen los violadores: hablar de cómo estaba vestida, de su vida, de cómo estaba. Ensuciar siempre es su estrategia. Le hicieron perfiles de redes truchos, publicaban sus fotos, es una adolescente y le afectó mucho”, dijo la madre de la adolescente y agregó: “El juez decía que había que proteger la identidad de la víctima, pero nunca se protegió. Nosotros queríamos exponer la causa, no que se supiera el nombre de mi hija”.

Críticas a la investigación

El juicio juzgó lo ocurrido el 1 de enero de 2019 en el camping El Durazno y su investigación estuvo a cargo de la fiscal Florencia Salas, quien no estuvo al frente del juicio.

La familia de la menor se mostró muy crítica de lo realizado por la fiscal. “Todo lo que se hizo mal desde el principio fue responsabilidad de la fiscal Florencia Salas. En un primer momento no lo vimos, estábamos shockeados, con dolor. Pero a la distancia nos dimos cuenta que se hicieron mal las pruebas, las extracciones de sangre y no tuvimos el apoyo que nos decían que teníamos. No fuimos contenidos ni protegidos desde el primer día”, dijo la madre de la menor.

Fuente: La Capital