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El pasado sábado y domingo, el escenario de Paseo 104 y Avenida 3 recibió a bandas y agrupaciones en homenaje a Juan Carlos Cupaiolo, uno de los folkloristas más icónicos de la ciudad. El público no solo disfrutó de la música y la cultura local, sino que también tuvo la oportunidad de bailar y vivir una propuesta diferente.

Juan Carlos Cupaiolo fue fundador del Centro Tradicionalista "Gauchos Geselinos". “Al principio yo cantaba tangos. Mi cantor preferido era Gardel”, contó en una entrevista. A sus 13 años, descubrió la ruralidad y el sentido de su vida: “Cuando vi el campo, los animales, la inmensidad del cielo, me di cuenta de que había encontrado lo que quería. Además, estaba el mar, esa presencia impactante”.

 Se estableció en Madariaga, donde aprendió el oficio de carnicero, y años más tarde recaló en Villa Gesell. Sobre la ciudad, decía: “Es mi lugar en el mundo, yo amo Gesell. Te parás en lo alto de un médano con un caballo y sentís que el mundo es tuyo”.

Su partida en 2020 no apagó su legado, que sigue vivo en el pueblo y en los amantes del folklore.